Rana: cualquier miembro de un grupo diverso de anfibios de cuerpo corto y sin cola.
Reino: | Animalia
Filo: | Chordata
Clase: | Amphibia
Orden: | Anura
Existen más de 5,000 especies de ranas conocidas, y los científicos continúan descubriendo nuevas especies. Las especies de ranas vienen en una gran variedad de tamaños y colores. Se pueden encontrar en diversos hábitats en todos los continentes excepto la Antártida. Las ranas son anfibios, que son vertebrados de sangre fría —es decir, tienen columna vertebral— que no tienen escamas. Los anfibios viven tanto en la tierra como en el agua. Otros anfibios incluyen a las salamandras, los tritones y las cecilias.
¿Cuál es la diferencia entre ranas y sapos? No existe diferencia: la palabra “rana” incluye tanto a las ranas como a los sapos. Aunque los sapos son ranas, la palabra “sapo” suele referirse a una rana con piel particularmente seca y verrugosa. Los sapos también suelen tener patas más cortas y ser más robustos. Las ranas suelen vivir en o cerca del agua con mayor frecuencia que los sapos.
Tamaño y peso
Las ranas varían ampliamente en tamaño y peso según la especie. Por ejemplo, la rana goliat del África Occidental puede crecer hasta 15 pulgadas y pesar hasta 7 libras. Mientras tanto, la rana arborícola cubana crece solo hasta media pulgada y pesa aproximadamente 2 onzas.
Apariencia
Las ranas y los sapos tienen cuellos casi inexistentes. Sin embargo, la mayoría de las especies tienen ojos grandes y saltones que les permiten ver en la mayoría de las direcciones sin girar la cabeza. La mayoría de las especies también son excelentes saltadoras en cualquier dirección. Tienen músculos poderosos en las patas traseras, lo que les permite saltar grandes distancias. Algunas ranas pueden saltar más de 20 veces la longitud de su propio cuerpo, lo que sería equivalente a que un humano saltara 30 metros. En comparación, el atleta olímpico Mike Powell tiene el récord de salto de longitud con 8.95 metros.
Las ranas vienen en una variedad de colores, pero presentan dos esquemas principales de coloración, cada uno para una técnica de supervivencia distinta. Los colores verdes y marrones moteados se usan como camuflaje, haciendo más difícil que los depredadores las detecten. Por otro lado, los colores brillantes, como los de la rana venenosa, sirven como señal de advertencia para los depredadores de que su piel es tóxica. Algunas ranas sudafricanas son tan venenosas que pueden matar a una persona. Otras ranas, como el sapo de lados lisos, tienen glándulas detrás de los ojos que producen toxinas poderosas capaces de matar a cualquier cosa que intente comerlas.
En cuanto a su piel, las ranas y los sapos tienen una capa de piel húmeda y permeable cubierta de glándulas mucosas. Pueden respirar a través de la piel además de los pulmones. La capa fina de mucosidad mantiene su piel húmeda y las protege de rasguños.
Dieta
La mayoría de las especies comen insectos, arañas, gusanos y babosas. Sin embargo, algunas especies más grandes pueden comer presas de mayor tamaño como ratones, aves y pequeños reptiles. Su piel absorbe el agua, por lo que no necesitan beber. Las ranas ayudan a mantener bajo control gran parte de la población mundial de insectos.
Hábitat
Las ranas prosperan en una gran variedad de ambientes, desde bosques tropicales hasta tundras heladas y desiertos. Su piel requiere agua dulce, por lo que la mayoría vive en hábitats acuáticos o pantanosos. Existen algunas excepciones, como la rana arborícola cerosa, que se encuentra en la región árida del Gran Chaco en Sudamérica. Estas ranas producen una sustancia cerosa que esparcen por su piel para evitar la evaporación.
Distribución geográfica
Las ranas se encuentran en todos los continentes excepto en la Antártida.
Reproducción
Los machos emiten llamados para atraer a las hembras durante la temporada de apareamiento. La hembra elegirá al macho cuyo canto prefiera, y el macho la abrazará mientras ella libera sus huevos, en un “abrazo” de apareamiento llamado amplexus. Casi todas las especies fertilizan los huevos fuera del cuerpo de la hembra. El amplexus puede durar horas, días o, en algunas especies como el sapo andino, meses. La madre pondrá desde dos hasta más de 50,000 huevos, según la especie.
En muchas especies, el macho cuida los huevos. Puede transportarlos en la espalda, en un saco en su vientre o en su boca hasta un lugar seguro donde puedan eclosionar en renacuajos. Aunque lo usual es que el padre realice estas tareas, en algunas especies es la madre quien las realiza, y en ciertos casos, ambos padres se turnan para cuidar los huevos.
Algunas especies tienen rituales reproductivos únicos. La rana marsupial, por ejemplo, lleva sus huevos en un saco como un canguro. La rana Surinam, por su parte, mantiene a sus crías incrustadas en la piel de su espalda. La rana incubadora gástrica de Australia se traga los huevos fertilizados y los libera cuando eclosionan.
Después de unas dos o tres semanas, según la especie, los huevos eclosionan en renacuajos. Los renacuajos, también llamados polliwogs, tienen branquias y cola como un pez, pero una cabeza redonda. Durante varios meses, los renacuajos desarrollan patas, absorben la cola, pierden las branquias y se transforman en ranas que comienzan a respirar aire y saltar. Este proceso se llama metamorfosis. Aunque la mayoría de las ranas completan la metamorfosis en unos meses, algunas especies tardan más. Por ejemplo, la rana de patas amarillas de montaña tarda al menos dos temporadas debido a las bajas temperaturas y los veranos cortos del lugar donde vive.
Estructura social
Las ranas son criaturas sociales que viven en grupos llamados ejércitos, colonias o nudos. Similar a los peces, las ranas jóvenes nadan juntas en cardúmenes. Cada especie de rana tiene un llamado único, utilizado para atraer pareja o advertir a enemigos. Durante la temporada de apareamiento, los machos croan en grupo a gran volumen. Algunas llamadas se pueden escuchar a una milla de distancia.
Esperanza de vida
La esperanza de vida de las ranas en estado salvaje es en gran parte desconocida, pero se cree que varía desde un día hasta 30 años. En cautiverio, algunas ranas han vivido más de 20 años.
Amenazas
La mayor amenaza para las especies de ranas es la pérdida de hábitat relacionada con la actividad humana y la expansión de las poblaciones humanas. Para las ranas migratorias, el aumento de carreteras e infraestructura ha incrementado la mortalidad por atropellos. Los humanos han introducido especies no nativas como truchas y otras ranas que se alimentan de ranas locales. Los contaminantes de la actividad humana también contaminan estanques y ríos, matando poblaciones locales de ranas y renacuajos.
Otra amenaza importante es la propagación de un hongo llamado chytrid (Batrachochytrium dendrobatidis). Esta enfermedad provocó la disminución catastrófica o extinción de al menos 200 especies de ranas y otros anfibios. El hongo vive en el agua, por lo que infecta fácilmente a las ranas. El hongo cubre su piel fina, impidiéndoles respirar o absorber agua. No solo afecta a las ranas adultas, sino también a larvas y renacuajos, creciendo en sus piezas bucales e impidiéndoles comer.
Estado de conservación
Muchas especies, casi 900, están clasificadas como “En Peligro” por la Lista Roja de la UICN. Más de 500 especies están clasificadas como “En Peligro Crítico”. El mundo enfrenta actualmente una crisis de extinción anfibia. Según la UICN, el 41% de los anfibios del mundo está amenazado de extinción.
Esfuerzos de conservación
Numerosas organizaciones y agencias gubernamentales están trabajando para proteger a los anfibios. National Wildlife Federation y Save the Frogs se encuentran entre los grupos que trabajan por la conservación de ranas.
En respuesta a la propagación del hongo quítrido, el Proyecto de Rescate y Conservación de Anfibios de Panamá trabaja para salvar ranas mediante consultas de bioseguridad y educación, además de proporcionar pruebas de la enfermedad a más de 80 zoológicos del país. Según la San Diego Zoo Wildlife Alliance, 60 especies de anfibios de Centro y Sudamérica han sido rescatadas y mantenidas en colonias seguras hasta que sea posible devolverlas a su hábitat. Doce de las especies más amenazadas ya se han reproducido bajo cuidado humano, incluidas la rana marsupial cornuda, la rana arborícola coronada y la rana arlequín Limos.
En Estados Unidos, la rana de patas amarillas de montaña (Rana muscosa) del sur de California está en peligro crítico, principalmente por la pérdida de hábitat, sequías, contaminación, depredadores introducidos y quitridiomicosis. La San Diego Zoo Wildlife Alliance trabaja para restaurar el equilibrio ecológico de su hábitat en las montañas de San Jacinto mediante cría en cautiverio y reintroducciones. Desde 2010, el zoológico ha reintroducido exitosamente renacuajos criados en cautiverio, con una tasa de supervivencia del 95% el primer mes, y ahora se están reproduciendo en libertad.
Fuentes: el Zoológico de San Diego, el Museo Americano de Historia Natural (AMNH), One Kind Planet y una publicación previa de NATURE




