

Bad Times
Episode 9 | 52m 16sVideo has Closed Captions
Maria and Juan try to intercept the truckers and find a bloodbath.
Maria and Juan try to intercept the truckers and find a bloodbath. Nico threatens Juan but Maria shoots him. They reunite with Jose to deal with the bodies, but Nico disappears. Meanwhile, Lucia finds drugs in Lucas’ backpack.
Problems playing video? | Closed Captioning Feedback
Problems playing video? | Closed Captioning Feedback

Bad Times
Episode 9 | 52m 16sVideo has Closed Captions
Maria and Juan try to intercept the truckers and find a bloodbath. Nico threatens Juan but Maria shoots him. They reunite with Jose to deal with the bodies, but Nico disappears. Meanwhile, Lucia finds drugs in Lucas’ backpack.
Problems playing video? | Closed Captioning Feedback
How to Watch The Accident
The Accident is available to stream on pbs.org and the free PBS App, available on iPhone, Apple TV, Android TV, Android smartphones, Amazon Fire TV, Amazon Fire Tablet, Roku, Samsung Smart TV, and Vizio.
Providing Support for PBS.org
Learn Moreabout PBS online sponsorship[♪ música de acción] - Toma, saca la droga de la caleta.
- Pero vamos a ver, papá, ¿qué hay con la droga?
- Es nuestro seguro de vida.
Hazme caso.
Ah, dame las llaves del camión.
- [Lucas] Mierda.
[♪ música de suspenso] - [Tomás] ¿Qué?
¿Qué pasa?
- [hombre] ¿El otro conductor?
- [Tomás] ¿Qué otro...?
No, no sé de qué, no sé de qué me hablas.
Voy solo.
Pero, pero... [golpe] [grita] [jadea] [dispara] [se queja] [jadea] [se queja] - No.
No, no.
- No, no, no.
- La mochila.
- No me mate.
No me mate, por favor.
- Primero la droga.
Y después te mato.
- !¡No!
!¡Hijo de puta!
- [Lucas] !¡Papá!
- Lucas, ¿estás bien?
- !¡Papá, no!
- ¿Estás bien?
¿Te han herido?
- Sí.
- ¿Puedes andar?
Ponte de pie.
Cógete, cógete de mí.
- Papá.
- Tranquilo, tranquilo, Lucas.
Tranquilo.
- [Lucas] [llorando] Papá... [♪ Cecilia Krull: "La verdad"] - Aguanta, tranquilo.
[Lucas se queja] Vamos, vamos.
[jadea] - [Lucas] Papá.
Papá.
Papá.
- Papá.
- [Tomás] Vete.
- [Lucas] No, papá.
- Vete de aquí, hijo.
- Papá.
!¡Papá!
[llora] !¡Papá!
!¡Papá!
Despierta, te llevo al hospital, por favor, papá.
[♪ música sentimental] [Lucas llora] [voces indistintas a lo lejos] - Mamá, ¿qué haces aquí?
¿Por qué no me has esperado dentro?
- Porque me daba vergüenza.
- Lo siento.
Anda, vámonos.
- No, hijo.
Espera un minuto.
- Mamá, no puedo quedarme aquí a hablar.
De verdad.
Vámonos.
- Lucía está embarazada.
- ¿Qué dices?
- Que vas a ser padre otra vez.
- ¿Tú cómo sabes eso?
- Porque he visto la ecografía.
- [Juan] !¡Para, para, para!
No te muevas del coche.
No te muevas.
[♪ música de suspenso] - [María] ¿Está muerto?
- He dicho que salgas del coche.
Joder.
Pero ¿qué ha pasado aquí?
- ¿Y Tomás y Lucas?
- No, no.
Falta Nico también.
Falta Nico.
- !¡María, quédate en el coche!
Tomás.
- Juan.
Dios mío.
- !¡Tomás, no!
Tomás.
!¡Lo mataron!
- Juan.
Juan, tenemos que coger la droga.
- !¡Me importa una mierda la droga!
Lo mataron.
Vámonos de aquí ya.
Métete en el coche.
Yo llevo el camión.
- [Nico] Para, Juan.
[♪ música de suspenso] - Nico, por favor.
- Se acabó.
- Por favor.
[dispara] [Juan jadea] María.
[llora] Gracias.
Gracias.
- ¿Me estás escuchando?
- [José] Claro que te escucho.
- Claro que te escucho.
- Pues no dices nada.
- ¿Tienes el teléfono ahí?
El mío está sin batería.
Tengo que hacer una llamada urgente.
¿Me lo dejas, por favor...?
- ¿Ahora?
- [José] Sí, mamá.
Ahora.
- ¿A quién?
- Mamá, ¿me lo dejas o no me lo dejas?
- ¿Vas a llamar a Lucía?
- No, voy a llamar a Juan.
Eh, ¿te lo busco yo?
- José.
- Gracias.
Guárdame esto, por favor.
[llamada al celular] - [Juan] José.
- [José] Juan.
- Joder, José, Tomás está muerto.
- ¿Que qué?
- [Juan] Están todos muertos.
Todos muertos.
Tomás, Nico, el otro tío.
- ¿Qué ha pasado?
- [Juan] No lo sé.
No lo sé.
Está todo lleno de sangre.
Lucas ha desaparecido.
- ¿Estáis bien?
¿María y tú estáis bien?
- Sí, estamos bien.
Estamos bien.
Estamos en un área de descanso en la Nacional.
José, ¿qué hago?
- Vale.
Vale.
Eh, ¿tenéis el camión?
- [Juan] Sí.
- De acuerdo.
Juan, escúchame.
Ahora hay que tener la cabeza fría, ¿vale?
¿Me oyes?
Quiero que metas los cuerpos en el camión.
- No, no, no.
No.
- Sí.
Y quiero que mires a tu alrededor y que no dejéis nada que pueda relacionaros.
- No, José.
José, no me pidas, no me pidas eso, por favor.
No puedo hacer eso.
- Sí puedes.
Juan.
- [Juan] Está lleno de sangre.
José, por favor.
- [José] Juan.
Sé que lo que te estoy pidiendo es una putada, pero lo vas a hacer porque sabes que no tenemos otra opción.
Lo sabes.
¿A que sí?
Por favor, haz lo que te he dicho.
Y luego te vas con María a la casa rural.
Ella sabe el camino.
Nos vemos allí.
¿De acuerdo?
Hermano, dime que lo harás.
Dime que lo harás.
- Sí, sí.
Sí.
- Bien.
Gracias.
Te veo ahora.
Hasta ahora.
Gracias.
Ya está.
- ¿Has hablado con Juan?
- [José] Sí.
- ¿Y qué le has dicho?
- Nada, una cosa de trabajo.
Mamá, me tengo que ir.
¿Vale?
Te dejo aquí.
- ¿Cómo?
¿Cómo?
¿Cómo?
Pero ¿a dónde?
Pero... - Gracias por el teléfono.
- Buenas.
¿Y Samuel?
- Ha subido tu padre a acostarlo.
- Mmm, qué rico.
- [Rosario] ¿Cómo estás?
¿Mmm?
- Bien.
- [Rosario] Pero ¿has sido?
¿Lo has hecho?
- Eh... - ¿Que has hecho qué, hija?
- [Lucía] Eh, Siéntate un momento, papá.
Eh, tengo que hablar contigo.
- Me está asustando, Lucía.
- No, no te asustes, porque solo quiero hablar.
Eh... - Bien.
Tú dirás.
[ruido lejano] ¿Y eso?
- Parece que es en el garaje.
Espera un momento.
- Espera, voy contigo.
- [Lucía] No, no te preocupes.
Que voy yo sola.
- [Lucas] Ayuda.
- ¿Lucas?
[jadea] ¿Qué es lo que te ha pasado?
Lucas, ¿qué te ha pasado?
Por Dios.
¿Qué le ha pasado?
- Avisa a José.
- No, José no está.
No.
Te voy a ayudar yo, ¿vale?
Venga, agárrate a mí.
Agárrate a mí, que te voy a llevar al hospital.
- !¡No!
- Vamos.
Lucas, por favor, mírame.
Mírame.
Te voy a llevar al hospital.
¿Vale?
- Llama a José.
- No, José no está.
- Llama a José, por favor.
- José no está, Lucas.
Por favor.
Vamos.
Venga.
- [Raimundo] Lucas.
- Papá.
Papá, está sangrando.
Está preguntando por José.
No sé qué le ha pasado.
¿Qué hacemos?
¿Qué hacemos?
- Tiene una herida de bala.
Deberíamos llamar a la policía.
- !¡No!
!¡A la policía no!
- Quieto, quieto, quieto.
[Lucía] !¡Lucas!
Se desmaya, papá.
Lucas, Lucas, despierta.
Lucas.
- Raimundo... el chico está perdiendo mucha sangre.
Lo primero es atenderlo.
Sí.
Luego ya pensamos lo que hacemos.
- Está bien.
- [Rosario] ¿Está es la bala dentro?
- Sí.
Lucía, trae un cuchillo y tijeras, y pinzas.
Gasas y toalla limpia.
- [Rosario] Venga, cariño.
- [Raimundo] !¡Y también alcohol!
Y agua.
- [Rosario] Date prisa.
Aguanta, Lucas.
Aguanta.
Aguanta, cariño.
Aguanta.
[♪ música de suspenso] Aguanta.
- Toma, mamá.
He traído gasa.
Eh, aguja e hilo.
- [Rosario] Sí, cariño.
- El cuchillo.
¿El alcohol?
- ¿Y el alcohol, cariño?
- Es que no tengo alcohol.
- [Raimundo] Lo necesitamos.
- Venga, date prisa.
- Y también un calmante.
- Papá, ¿tú sabes lo que estás haciendo?
- [Raimundo] Pinzas.
[♪ música de suspenso] - ¿Por qué pondrán la fecha de caducidad tan pequeña?
- Eh, a ver.
- ¿Aquí pone 2010 o 2018?
- Eh, 2018 creo.
Pero da igual, si me lo voy a llevar lo mismo.
- No, igual no da igual.
Igual no da.
A ver si va a producir el efecto contrario.
- No te preocupes.
¿Esto es paracetamol?
- Y no me has dicho pa quién son.
¿Está el niño malo?
- No, el niño está perfectamente.
No te lo puedo contar ahora.
Te lo cuento mañana, ¿vale?
Isa, esto está vacío.
¿No tienes más alcohol?
- No, no tengo.
Como no quieras una botellita de orujo que tengo por ahí.
- Lo, ah... ¿Lo tienes aquí?
- [Isabel] ¿Me lo estás diciendo en serio, Lucía?
- Claro que te estoy diciendo en serio.
Eh... - Aquí.
- Eh, eh, Ginebra.
Mira, me llevo esto.
Esto es tequila.
Y la ginebra.
Eh, Julián, te lo traigo mañana, ¿vale?
Ábreme la puerta, porfa.
- [Isabel] Sí, sí.
- Buenas noches.
- Buenas noches.
Hablamos, ¿eh, Lucía?
- [Lucía] Sí, sí.
- Cariño, Lucía se ha llevado todas nuestras botellas.
- No, todas, todas, no.
Mira, aquí hay ron para un chupito.
[♪ música de suspenso] - [José] ¿Qué?
- Ay, le he matado.
- [José] Ya está.
- Le he matado, José.
- No tenías otra opción.
- Joao.
Cuando se entere Joao... - Ya, cuando se entere Joao, nos va a matar a todos.
Eso es lo que va a pasar.
- [José] Escúchame.
Escúchame, por favor.
Le he estado dando vueltas a lo que podemos hacer.
Y creo que, aunque parezca una locura, lo mejor es que te vayas a casa cuanto antes.
Escúchame, por favor.
- No.
- Los únicos que saben lo que ha pasado de verdad están muertos.
Lo mejor, lo menos sospechoso es que te vayas a casa y hagas como si nada.
- Creo que tienes razón, María.
- [José] Mírame.
Mírame.
Mírame.
Ha pasado muy poco tiempo.
Nadie se está preguntando dónde estás.
- Hazle caso, José.
Lo mejor es que te vayas cuanto antes y con un poco de suerte, nadie te habrá echado de menos.
- ¿Qué vais a hacer vosotros?
- [José] Por nosotros no te preocupes.
Nos encargamos de los cadáveres.
¿De acuerdo?
Ya verás cómo sale bien.
- Está bien.
Tened mucho cuidado, por favor.
- [José] Sí.
- Me llamáis en cuanto podáis.
¿Va?
- Están ahí detrás.
- Vale.
- [Juan] José.
José.
José, ya está.
Ya está.
Ya está, vale.
Ya está hecho.
No podemos hacer nada.
Ya está.
- Es que esto es culpa mía.
¿Entiendes?
- Vale, hermano... - Yo soy el responsable de esto.
- Vale.
[♪ música de suspenso] No, la puta.
No puede ser.
- ¿Qué pasa?
- No está Nico.
- ¿Cómo que no está?
- Debió saltar del camión.
No sé, mira.
- [José] ¿Qué?
- [Juan] La puerta debió estar mal cerrada.
Yo qué sé.
Hay que contarle, José.
!¡Vamos!
[♪ música de suspenso] - [Joao] Lula.
Lula.
!¡Lula!
- [Lula] ¿Qué?
¿Qué pasa?
- [Joao] ¿Sabes algo de Nico?
- [Lula] Nada.
- [Joao] Debería estar ya aquí.
- [Lula] ¿Has probado a llamarle?
- [Joao] Es la primera vez en la vida que Nico no me atiende una llamada.
Esto empieza a no gustarme.
- [Julián] Chiqui.
- Uy, qué susto, Julián.
¿Tú qué haces aquí a oscuras?
- ¿Y tú?
- Yo me he desvelado y no quería despertarte.
- ¿Ni siquiera te has dado cuenta que no estaba en la cama?
- Pues no, la verdad es que no.
Oye, no te lo comas todo, ¿eh?
Que yo también quiero chocolate.
- Mjm.
Sabes que es un sustitutivo del sexo, ¿no?
- Sí, claro.
Lo sabe todo el mundo.
¿Y?
- Qué guapa estás.
Isabel, ¿sabes cuánto tiempo llevaba sin hacerlo?
- Pues, no sé.
No llevo la cuenta.
¿Y tú?
¿Tres semanas?
- Meses.
- ¿Tres meses?
No, hombre.
No fue hace tanto.
¿Cuándo fue la última vez?
En la boda de tu primo, ¿no?
- Tres meses.
- ¿Tres meses?
Guau, cómo pasa el tiempo.
Pues no sé, cariño.
Ya se nos pasará.
Debe ser una racha.
No sé.
- Nunca nos vamos a la cama al mismo tiempo.
- [Isabel] No, eso es verdad.
Pero es que te quedas hasta las mil viendo la tele, Julián.
- Porque sé que no tengo nada que hacer.
- ¿Tenemos que hablar de esto ahora mismo?
Es que estoy cansada, preocupada por Lucía, desvelada.
Lo podemos hablar en otro momento, ¿no?
¿Eh?
- ¿Subimos?
- Tú no me estás escuchando.
Que no tengo humor, Julián.
- ¿Lo ves?
- Bueno.
Yo me subo a dormir.
- Yo voy a ver un rato la tele.
- !¡Mamá!
!¡Mamá!
- [Lucía] ¿Qué pasa, Samuel?
¿Qué ha pasado?
- Tengo miedo.
- ¿Tienes miedo?
- Sí.
- ¿Por qué?
¿De qué?
¿Qué ha pasado?
- He soñado que estabas en la feria.
En, en el, en la montaña esa.
- ¿En la montaña rusa?
- [Samuel] Mmm.
- ¿Y qué?
- Y el coche se caía.
Y llamaba a papá y no estaba.
Y a ti te aplastaban las ruedas del coche ese.
- Bueno.
Ya está.
Es una pesadilla, mi amor.
Estoy aquí contigo.
Está todo bien.
Papá viene mañana.
Venga.
- Vale.
- ¿Quieres que te cuente un cuento?
- Sí.
- Y así te duermes.
Venga.
A Ver.
Bueno.
- [Samuel] No.
- ¿No?
¿Ya tienes sueño?
- No.
- Sí.
[♪ música de suspenso] - [Juan] José, llevamos más de una hora buscándole.
Y lo mismo ese cabrón.
No está ni en el bosque, porque ha podido saltar del camión en cualquier momento.
- [José] ¿Y qué hacemos?
¿Qué hacemos?
¿Nos vamos a casa a dormir?
- Sh.
No lo sé.
No lo sé.
Yo solo digo que además de buscar a Nico, deberíamos pensar qué hacemos con los cadáveres, que los puede ver cualquiera, coño.
Eso por no hablar ya de la droga perdida y del canteo que es tener un pedazo de camión ahí, en medio aparcado, que... - [José] Que sí.
- ...que la policía puede aparecer en cualquier momento.
- Que sí.
[crujido] - Ah, mi amor, no sabía que estabas en casa.
- Mmm.
[disparo] [jadea] - ¿Qué te pasa?
Estás helada.
- No, es que... - María, estás temblando.
¿Qué?
¿Qué...?
- Perdona, perdona, perdona.
Es que no, no sé qué me pasa, ¿eh?
No... No me, no me siento bien.
- ¿Por qué?
¿Has comido algo?
¿Qué, qué?
- No sé.
Quiero vomitar.
No sé.
- [Joao] ¿Te has sentado mal?
- Puede ser.
Sí.
- Mi amor.
¿Quieres que le diga a Lula que te prepare algo?
- Sí, sí, por favor.
Sí.
Sí, por favor.
Ay.
Gracias, ¿eh?
[♪ música de suspenso] [jadea] - [Joao] Lula, di que le preparen una manzanilla a María.
No se encuentra bien.
- [Lula] [habla en portugués] Acabo de llamar a Nico y sigue sin responder.
- [Joao] Entonces ordena a todo el mundo que salgan inmediatamente a buscarle.
[♪ música de suspenso] - Hay que echar un poco de hojarasca por encima.
- Ni tan mal, ¿no?
- [José] Vámonos.
Hay que ir a buscar a Nico.
Toma.
Tengo seis pérdidas de Lucía.
- ¿Cómo?
- Tengo seis llamadas perdidas de Lucía.
- ¿Y qué dice?
¿Está bien?
- Lucas está en casa.
- ¿Que Lucas está con Lucía?
- [José] Sí.
- ¿Y te dice cómo está el chaval?
- No, no dice nada más.
Tenemos que dividirnos.
Tengo que ir a casa a ver qué coño pasa con Lucas.
Y deshaces el camino con el camión.
- ¿Por qué?
- Sé que es una putada, hermano, pero tienes que encontrar a Nico antes de que amanezca.
[exhala] ¿Puedes?
- Sí, claro.
- Ve con cuidado, ¿vale?
- Vos también.
[♪ música de suspenso] [Nico se queja] [jadea] [♪ música de suspenso] [se queja] [timbre] - Hola.
- ¿Qué haces aquí, José?
- ¿Cómo está Lucas?
- ¿Cómo que cómo está?
- Tengo que hablar con él.
Déjame verle, por favor.
- Eh, José, no, no puedes estar aquí.
O sea, está, mi padre dentro.
Como te vea, te mata.
- ¿Por qué está tu padre aquí?
- ¿Que por qué está mi padre?
Pues menos mal que está porque le has salvado la vida.
Tenía una herida de bala.
¿Tú lo sabías?
- ¿Cómo está?
- Eh, ¿cómo va a estar?
Muerto de miedo.
Mmm, ¿cómo va a estar?
¿Me puede decir qué está pasando?
- No te lo puedo contar.
- [Lucía] Ah, ¿no me lo puedes contar?
- No.
- ¿Qué coño de lío te has metido, José?
- Creo que es mejor que me lleve a Lucas de aquí.
También por Samuel.
No quiero que le vea.
- Un poco tarde para pensar en tu hijo, ¿no?
- [José] No hago otra cosa que pensar en ti y en Samuel.
Y en cómo arreglar esto.
- Ya.
- Pues no quiero que tú estés preocupada en el estado en el que estás.
- ¿Y en qué estado se supone que estoy aparte de estar hasta las narices de que todo el mundo me oculte cosas?
- Sé que estás embarazada.
Lo sé.
- Vete ahora mismo de aquí si no quieres que llame a la policía.
- Eh, papá.
José, vete.
Venga, por favor.
- Un momento.
¿Lucas traía algo con él?
¿Una, una bolsa?
Una... - Eh, José, vete.
Si quieres ayudar, llévate el coche ese de enfrente que lo ha traído Lucas.
Venga.
Ya está.
[♪ música sentimental] - Hija, yo no sé en qué asunto está metido tu marido y si tú lo sabes.
Pero esto no pinta bien.
- Papá, no le he dejado entrar y lo he echado de casa.
Ya está, ¿no?
- No es suficiente.
Lucía, escúchame.
Tú eres su mujer y todo esto te acabará manchando a ti también.
- No lo sé, papá.
- Sí, hija, sí lo sabes.
Tú eres una mujer muy lista.
- Yo voy a llevarme a Lucas antes de que se levante y lo vea Samuel.
[♪ música de suspenso] [♪ música tensa] [Lucía exhala] - Tengo el coche de Nico escondido ahí atrás.
¿Dónde está?
¿Lo has encontrado?
- He hecho el recorrido cuatro veces.
Ni rastro de él.
¿Qué coño vamos a hacer, José?
Ese tío no puede andar suelto por ahí.
- Bueno, lo primero que vamos a hacer es tranquilizarnos, ¿vale?
No vamos a ponernos en lo peor tampoco.
Está muy grave.
Ha perdido mucha sangre.
A lo mejor, a lo mejor está muerto en algún rincón de la carretera.
¿No?
- O a lo mejor no.
Ahora mismo está yendo a la policía.
O a casa de Joao.
Que es peor.
- Hay que llamar a María para que salga de allí ahora mismo.
[pasos acercándose] - María.
María, despierta.
¿Qué te pasa?
Llevas un siglo durmiendo.
¿Estás enferma o qué?
- ¿Qué pasa?
- Pues, que Joao y yo nos vamos al hospital.
Han llamado.
Nico está ingresado.
- ¿Quién?
Espera.
¿Qué ha pasado?
- [Lula] Está en coma.
De momento no sabemos más nada.
- [María] Lula.
Eh, voy con vosotros.
Dile a... Dile a Joao que me visto y voy con vosotros.
- Pues date prisa.
[♪ música de suspenso] - José, eh, es Nico.
Está ingresado.
Está en coma.
[timbre] - [Lucía] ¿Qué haces, Juan?
Que está el niño acostado.
- Lucía.
- [Lucía] Pasa.
- No, no hace fa... - [Lucía] Pasa.
- Bueno.
Bueno, bueno.
Tú, ¿tú estás bien?
- [Lucía] Sí.
¿Qué te ha pasado, Juan?
- Eh, ah... ¿Y el niño?
¿Samuel está bien?
- El niño está durmiendo.
- Ah, durmiendo, claro.
Pero no, no lo habré despertado, ¿no?
- No.
- [Juan] Vale.
Ya sé que soy un pesado, pero quería ver, solo quería ver si estabais bien.
Tú y el niño.
Y... Perdona, es que me he tomado una copa de más.
- Ya, ya te veo.
- Ya, ya me voy.
- No, no, no te vas.
Tú no estás pa conducir, Juan.
Quédate y te das una ducha, te tomas un café.
- No, qué va, qué va, que no quiero molestar.
- Eh, Juan, venga.
Date una ducha.
Y así hablamos.
- Vale.
[exhala] [♪ música sentimental] [inspira] [exhala] [exhala] Tenías razón con la ducha.
Me ha sentado muy bien.
- Claro.
- ¿No te importa que coja ropa de José?
He visto que la mía... - [Lucía] ¿Por qué me va a ir importar?
Puedes coger lo que quieras.
¿Qué te ha pasado, Juan?
- ¿Por qué?
- Que yo nunca te había visto así.
- Una copa de más, o sea que no me has visto a veces.
- Sí, de juerga, de risa.
Pero no me refiero solo a la copa de más.
Traías unos ojos que...
Ten cuidado con, con tu hermano.
No te arrastres en su movida.
- Es mi hermano.
- Ya, ya sé que es tu hermano.
Pero tú eres demasiado bueno.
- No, no tengo nada de bueno.
Nada bueno.
Lucía, tú eres la que tienes que tener cuidado.
- ¿Yo por qué?
- Si te pasara algo, yo... - ¿Qué dices, Juan?
- Da igual.
Me tengo que ir.
Cuídate mucho, ¿vale?
[♪ música de intriga] -[Julián] Buenos días.
- [Isabel] Buenos días.
Uy, ¿todavía en pijama?
¿Y eso?
¿Estás enfermo o qué?
- No, estoy en paro, que es lo mismo.
¿Hay mantequilla?
- [Isabel] No, hay margarina que es más sana.
- Lo que es es más barata.
De verdad, qué asco.
- [Isabel] ¿Qué, Julián?
Julián, no hables así.
No puedes desanimarte.
Pero, pero... No puedes animarte por ti y tampoco por mí.
Porque, porque me afecta.
Mira, eh, si quieres, podemos revisar tu currículum y, y ver, y ver si lo podemos mejorar o... Ah, o podemos quitarle tu fecha de nacimiento, como dijimos, ¿no?
- Si te empeñas.
[llamada al teléfono] - Ay, mira, Lucía.
Espérate.
- Cómo no.
- Lo cojo.
Luci.
Sí.
Sí, sí, estoy aquí.
Bueno, bueno.
Tranquila.
Tranquila, Lucía.
Vale, vale.
Voy, voy.
Sí, sí.
De verdad no, no, no estaba haciendo nada importante.
Bueno, cinco minutos, ¿vale?
Tranqui.
Eh, perdona, pero vemos luego lo de tu currículum, ¿vale?
Que, que Lucía quiere hablar conmigo.
- ¿Qué le pasa ahora a Lucita?
- Pues, no lo sé.
Hasta que no vaya, no lo sé.
- Ah, y cuando lo sepas, no me lo contarás.
- [Isabel] Hombre, depende.
Hay muchas cosas que sí te cuento.
Lo que pasa es que hay otras, pues que son, pues, que quedan entre amigas.
- Mira, cariño, tú me dices que yo no hago nada.
Pues, tú, en cambio, no paras de hacer cosas.
Y todas, todas, todas las haces por esa amiga tuya del alma.
- Bueno, bueno, o sea... - Ya veremos si no acabas metida en un lío de cojones.
- No seas exagerado, ¿eh?
Mira, te vas a duchando y en lo que te duchas y terminas, yo ya he vuelto.
Ah, y, y aféitate también.
[exhala] Hija, ¿qué pasa?
- Cierra la puerta.
- [Isabel] Bueno, bueno.
Por favor, ¿qué pasa?
- Mira lo que pasa.
Mira.
¿Esa es droga?
- Pero ¿tú por qué tienes esto?
- Eh, ¿es o no es?
Míralo.
- Pues... No lo sé, pues, no lo sé.
Pues, parece que sí.
No.
O por lo menos se parece a lo que sale en el telediario.
- Pues, está hasta arriba.
Hasta arriba está de droga.
- Pero, Lucía, ¿tú de dónde has sacado esto?
- ¿Cómo que de dónde he sacado yo?
Que esto no es mío, niña.
Que, que, que ha venido un, un conductor de José, que ha venido a mi casa herido de bala esta noche, con esto está hasta, hasta arriba de droga.
- ¿Qué me estás contando, por favor?
¿Qué me estás contando?
Un herido de bala.
Una mochila llena de droga.
Pero es, es, es como si estuviésemos en una peli de narcos.
- Pues, sí.
- No, Lucía, por favor.
- Esto es una puta pesadilla de verdad.
Yo lo siento mucho, amiga, porque es que te acabo de meter en un lío muy gordo.
Pero es que no sabía qué hacer.
O sea, no sé si devolvérselo al muchacho, si llamar a José, si llamar a la policía.
Te juro que, que, que lo que me dan ganas es de tirarlo al bate.
- Espera, espera.
Tranquila, tranquila.
Vamos a pensar.
Yo creo que lo mejor es que llames al, al, al inspector ese, al que conocen, ¿no?
- ¿Y qué hago?
¿Denunciar al padre de mi hijo?
- [Samuel] Mamá.
- Dime, mi amor.
- ¿Que puedo llevar el disfraz de Batman al cole?
- Eh, sí, claro.
¿Y tú sabes ponértelo solo como Batman?
¿Sí?
Pues, sí, claro que sí.
Choca.
- [Isabel] Mira, Lucía.
Yo no sé lo que vas a hacer.
Pero mientras te decides, lo que tengo claro es que eso no lo puedes tener tú en tu casa.
No con un niño pequeño y otro que viene en camino.
- ¿Y qué hago?
Dime qué hago.
- Eso me lo voy a llevar yo a mi casa.
- Pero ¿qué dices, Isa?
Que esto tú no te lo puedes llevar a tu casa.
- Sí, sí.
Me lo llevo.
- Pero que estás loca.
Escúchame un momento, amiga, que no puedes, que te meten en la cárcel.
- Mira, escúchame tú un momento.
José está metido en un lío muy gordo, por lo visto.
Sí.
Y no sabemos si lo están investigando.
No, no, no sabemos.
- Vamos a ver, Isa.
- Lo que está claro es que yo no soy sospechosa de nada.
- Pero... - Así que yo me lo llevo.
- Es que esto es un disparate, Isa.
- Me lo llevo.
Lo hago por ti, porque eres mi amiga y te quiero y punto.
- Pero... - [Isabel] Dios mío.
Esto es de locos.
Esto es de locos.
[♪ música de suspenso] - [doctora] La bala le ha provocado desgarros internos y una grave infección.
Aún estamos tratando de averiguar si tiene algún órgano vital afectado.
- Por Dios, pobre Nico.
- Pero ¿hay alguna posibilidad de que sobreviva?
- [doctora] Es pronto para saberlo.
Pero no pierdan la esperanza.
He visto casos peores salir adelante.
- Quiero verlo, si es posible.
- [Lula] Yo también quiero verlo.
Vamos.
- Oh.
[exhala] Nico, ¿me oyes?
No voy a dejar las cosas así.
Voy a encontrar al cabrón que te ha hecho esto y va a sufrir más de lo que estás sufriendo tú.
Ojalá pudieras decirme quién ha sido.
- No perdamos la esperanza, Joao.
Nico es muy fuerte.
Yo estoy segura de que se va a recuperar.
[golpes en la puerta] Es el inspector.
- Ahora mismo salimos.
- Gracias.
Señor Ferreira.
Señora.
María, ¿verdad?
Inspector Sánchez.
- No sabe cuánto me alegra verle por aquí, inspector.
- ¿Saben qué ha pasado?
- Por desgracia, no sabemos nada que no sepa usted.
Lo único evidente es que alguien ha atacado a mi empleado.
- [Ramón] Sí, eso es evidente.
Y nuestro trabajo ahora es averiguar quién lo hizo y por qué.
¿Tienen alguna idea de quién ha podido ser?
¿No?
¿Saben si había sufrido amenazas anteriormente o si tenía alguna, alguna cuenta pendiente?
- Puede que haya sido un intento de atraco.
- ¿Atraco?
- [Joao] Sí.
A veces encargo a Nico que retire cantidades en efectivo para los pagos.
No era el caso.
Pero el atracador no tenía por qué saberlo, ¿verdad?
- No, claro.
Pues lo tendré en cuenta.
Ahora mismo estamos abiertos a cualquier tipo de hipótesis.
- Encuentre al culpable, inspector.
Tiene que encontrarlo.
- Le aseguro que por lo menos lo intentaremos.
Mientras tanto, Nico estará bajo vigilancia.
- ¿Le van a vigilar?
¿Por qué?
- Bueno, Nico es el único que sabe lo que ha pasado.
No quiero problemas.
- Claro.
- Ya conocen a Nacho.
Si necesitan cualquier cosa, estará aquí las 24 horas.
Avísenme si se despierta.
Ah, no.
Usted ya sabe dónde encontrarme.
Buenos días.
- Buenos días.
- Iros vosotros si queréis.
Yo me quedo con Nico.
- No.
Que se quede María.
Tú tienes que acompañarme, Lula.
- Como quieras.
- Vamos a por unas muletas.
- ¿Unas muletas para ti?
- [Joao] Sí.
Y luego vamos a ir al aeródromo.
Quiero recoger a un viejo amigo.
Y quiero que me vea de pie.
- ¿Quién viene?
- Paul Bresson.
Se va a quedar en casa unos días.
A María le va a gustar verme de pie, ¿verdad?
[♪ música dramática] - [Lucía] Perdone.
Eh, ¿podemos hablar un momento?
- Claro.
- En, en su despacho.
- Ah.
Pasa, pasa.
Siéntate, por favor.
[exhala] - Es que no sé por dónde empezar.
- Si no estás segura de querer contarlo, no lo hagas.
- Ya, pero es que esto se lo tengo que contar.
- Supongo que tiene que ver con tu marido, ¿verdad?
¿Has descubierto algo?
- Eh... creo que José, eh... transporta... - Droga.
- Pero, pero que lo... ¿Que lo sabía y no ha hecho nada?
¿No la ha detenido?
- A ver, Lucía.
En estos momentos José no me interesa demasiado.
Tu marido es un peón al que están utilizando.
Yo al que quiero es a su jefe.
Joao Ferreira.
Y si la suerte se pone de mi parte, quiero un capo aún mucho más importante.
- !¡Por fin!
[ríe] !¡Compañero!
Pero ¿qué te pasa?
No me lo puedo creer.
¿Puedes andar?
- ¿No te prometí recibirte de pie cuando volviéramos a vernos?
- Sí, pero es un milagro.
No me jodas.
Los médicos han dicho que no podrías nunca más.
- ¿Y cuánto habíamos apostado?
[ríe] - Diez mil.
- Me los debes.
- Por supuesto, pero [en francés].
- Pues, vamos al coche.
- !¡Ey, ey, ey!
!¡Joao!
Martín.
- No puedo dar un solo paso, pero te he recibido de pie.
Esa era la apuesta.
Así que me debes 10 000.
[ríen] Venga, cabronazo.
- [Ramón] Paul Bresson.
Entre los dos están planificando una de las operaciones más importantes del narcotráfico en Europa.
Llevan trabajando juntos mucho tiempo.
Eran mercenarios en la guerra de Angola y allí aniquilaron muchos poblados.
Se hacían llamar Los Ángeles Blancos.
- Eh, no entiendo por qué me cuenta todo esto.
¿Qué tiene que ver con José?
- Me temo que mucho.
Aparte de ellos dos, había un tercero.
Aquí están los tres Ángeles Blancos.
[♪ música tensa] - [Lucía] Pero... Pero el tercero es mi padre.
- Mjm.
- No, pero eso... Esto, esto no puede ser.
Esto es imposible.
Que mi padre es evangelista.
Es pastor.
O sea, detesta la violencia.
Mi, mi padre no tiene ninguna relación con Joao, además.
O sea, no... - Pero la tenían.
Si no se hablan es porque Joao nunca le perdonó que abandonara el comando.
De cierto modo, está en deuda con él.
¿Lo entiendes?
- Me, ¿me estás queriendo decir que de alguna manera... Joao ha elegido a José?
¿Que le está utilizando?
- En parte.
Pero eso no exime a José de su responsabilidad.
José ha estado traficando con heroína y... - ¿Y?
- Bueno.
Tengo que decirte que tú tampoco estás exenta de responsabilidades.
- ¿Cómo?
- A ver, Lucía.
[exhala] Lucía, si un juez quisiera, podría imputarte.
- Pero vamos a ver, yo, yo, yo no sabía nada.
Yo no, yo no tengo nada que ver con todo esto.
- Lo sé.
Lo sé, Lucía.
- ¿Cómo que "lo sé"?
"Lo sé".
¿Y qué hago?
¿Qué hago?
- De momento no puedes hacer nada.
- Pero ¿cómo que no puedo hacer nada?
No me puedes dejar así.
Me tienes que ayudar.
Yo, yo he venido aquí a contar todo lo que sé.
- A ver, Lucía.
- ¿Qué?
- No sé, no sé.
Déjame pensar algo.
Algo se me ocurrirá.
[exhala] [llamada al celular] Perdona.
Ahora vuelvo.
- No lo puedo creer.
[exhala] [♪ música de suspenso] - [Paul] Creí que habías conseguido lo imposible.
Ya ves, Lula, tu hermano me sigue tomando el pelo.
Así toda la vida.
- [Lula] No sabes la que ha montado para recibirte de pie.
También quería que María le viese llegar a casa.
- Mmm.
Cuidado.
A ver si te vas a hacer daño.
- Oye, pero ¿qué pasa?
¿Me estás llamando viejo?
[ríe] Pues, sí, soy viejo.
Pero todavía tengo la cabeza en mi sitio.
No te preocupes.
- Lo sé.
Si no, no contaría contigo.
Joao.
La operación ha crecido.
El cargamento trae cocaína como para abastecer toda la zona mediterránea.
- Muy bien.
- Pero tienes que garantizarnos que pasará sin problemas los controles del puerto.
- Bueno, esa es mi parte del trato.
¿Qué?
¿Qué es lo que te preocupa?
- A mí nada.
He oído que han tenido algún tipo de problema.
¿Es muy grave?
- No.
Ya no.
Pero tenemos que eliminar a una persona.
Alguien que me ha traicionado.
- ¿Es eso?
[en francés].
Martín se encarga.
Solo necesitamos el nombre.
!¡Martín!
- José Espada.
- Perfecto.
Cuando me digan.
- ¿Ves?
[Paul ríe] - Bueno.
¿Qué?
¿Qué?
¿Qué?
¿Qué es de tu vida?
¿Sigues soltero?
- [en francés] Eso me temo.
- Oh, qué pena.
¿Por qué no te buscas una compañera y sientas la cabeza?
Una mujer a tu lado es un tesoro.
- [Paul] Sí, tienes razón.
Pero no tengo suerte.
Al menos no tanta como tú con María.
[Lula exhala] - Uh, parece que alguien no está de acuerdo contigo.
- Lula, ¿qué pasa?
[portugués].
María es un encanto.
No he conocido mujer ni más guapa, ni más dulce, ¿verdad?
- Ya.
- !¡Venga, campeón!
- Quiero que te mueras ya.
Quiero que te mueras... !¡Ya!
[monitor cardíaco acelera] - [Nacho] ¿Qué pasa?
- No lo sé.
No lo sé.
No sé qué pasa.
No lo sé.
No lo sé.
No lo sé.
No lo sé.
- [Nacho] !¡Un médico!
!¡Que venga un médico, por favor!
- Señora, ¿qué ha hecho?
¿Ha tocado algo?
- No, no, no.
Yo solo... yo solo estaba hablando con él.
- Vuelve a tener actividad cerebral.
- ¿Qué quiere decir?
¿Eso es bueno eso?
- [enfermera] Mucho.
No sé qué le ha dicho, pero... ha despertado del coma.
[♪ música dramática]
Support for PBS provided by:















